sábado, 29 de enero de 2011

Desde el otro extremo del mundo: "libros y no armas"


Cuando inauguramos el blog, ahora hace un año, pensábamos en lectores de nuestro entorno, así que ¡cuál fue la sorpresa cuando recibimos comentarios de gentes que no conocemos, pero que comparten con nosotros el amor por los libros!
De modo que, cuando hoy me ha escrito un amigo: "Bienaventurado quien no tiene blog", he pensado inmediatamente en lo alejada que está esa frase de la humanidad que me llega gracias al blog.
Pues bien, justo hoy también me manda un correo otro amigo con unas nuevas bienaventuranzas. Entre ellas, ésta: "Bienaventurados los que no tienen sed de justicia porque no la encontrarían en internet".
Inmediatamente me han venido a la cabeza todas las denuncias sociales que me llegan cada día de amigos como él y las reivindicaciones de Amnistía Internacional o las de Actuable, por ejemplo.
Eso estaba pensando cuando he abierto un tercer correo que me avisaba de un nuevo comentario en el blog, a propósito de la entrada de diciembre, "José Alberto Gutiérrez. Libros en la basura". Las dos historias que en ella contamos han suscitado comentarios que nos conmueven: del mismo Luis Humberto Soriano Bohórquez, el maestro del Biblioburro, del que hablábamos en la entrada; otro de Santander, otro de un universitario que pide ayuda para su tesis, uno más de una impulsora de bibliotecas de barrio en Buenos Aires, y éste de hoy, que nos ha llegado muy hondo, de Susana Báez, de Ciudad Juárez, en Méjico.
Lanza una pregunta: "¿por qué los ciudadanos no asumimos (en general) el compromiso de crear la calidad de vida a la que tenemos derecho?, ¿hasta cuándo los gobiernos de estos países sumidos en tantas violencias entenderán que su responsabilidad es invertir en políticas culturales?"
Esta sed de justicia estremece cuando la proclama una profesora universitaria de esa ciudad tristemente conocida porque un día y otro los periódicos traen noticias de la violencia que se produce allí.
Gracias a su blog me informo de que sus intereses son "la literatura infantil y juvenil, la de mujeres, los estudios de género, la literatura de las fronteras, la literatura española y mexicana contemporánea".
Y me adentro en su blog, "Palabras de arena", y encuentro un espacio hermoso para reivindicar la justicia, centrado, en este fin de semana por la paz, en un acto con este lema: "Para que terminen las dictaduras de México y el mundo siempre de terror, de locura, de muerte. No militarización ni más falacias del malgobierno. ¡Justicia!"

Un artículo de El Universal habla de su labor: "En tiempos de guerra los libros se han convertido en estandartes de paz. En épocas de violencia, narcotráfico y discriminación, la lectura se levanta como emblema de alegría, confianza en la humanidad y esperanza. Mientras unos levantan trincheras en el desierto, otros apelan a tomar los libros y no armas; son colectivos de jóvenes que desde la gestión civil emprenden tareas para fomentar la lectura.
La lectura es muchas cosas a la vez: genera viajes imaginarios a los confines de la tierra, pero también puede alejar de la violencia a los lectores que ávidos se adentran en mundos menos duros que los reales. Entre estallidos, narcotráfico, violencia, maquiladoras y narcofosas, los espacios para el libro y la lectura, son oasis en medio de la desértica realidad mexicana."

Tras un hecho de sangre, los del colectivo "Palabras de arena" toman el lugar para hacer lecturas, como una manera de que la sociedad vuelva a hacer suyos esos espacios.
Leyendo esto, recibimos una lección de humildad: es fácil desarrollar planes lectores en España, aunque no consigamos siempre el esperado fruto, pero es insignificante lo que hacemos, al lado de lo que desarrolla el colectivo "Palabras de Arena", en medio de la violencia, a los que devolvemos de corazón sus abrazos solidarios.

4 comentarios:

  1. Buenas,

    la lectura es un soplo de paz en un mundo cargado de violencia. Empuñemos el futuro con un libro en la mano y no con armas destructoras. Resulta esperanzador recibir una noticia de este tipo de la turbulenta Ciudad Júarez, ojalá las cosas cambien. En algún momento tendrá la rueda que cambiar su dirección...

    Felicidades por el primer año de vida del blog. Que haya muchos más levantando claramente la fuerza de la palabra.

    ¡Saludos!
    Raimawa

    ResponderEliminar
  2. Gracias, Raimawa:
    Tú lo has dicho: la lectura, un soplo de paz.
    Gracias por la felicitación a ti que nos sigues casi desde el principio.
    Un abrazo:
    Carmen

    ResponderEliminar
  3. Querida Carmen, mi maestra feminista-amiga-confidente-compañera Susana Báez me enseñó junto a mi otra comprometida compañera, Ana Laura, que las redes humanas sólidas y honestas son las armas para resistir, desde la literatura, desde cualquier arte, pero también desde otros espacios que nada tienen que ver con él. Lo mejor de todo es que lo hemos aprendido del acto. El internet es otra herramienta más para formarlas, el ciberactivismo nos acerca a otras personas que luchan a su manera contra las mismas injusticias. Agradezco enormemente tus palabras. Ayer unos chicos otomíes me decían: "No estamos sólos hay tantos y tantas por ahí fortaleciendo, sembrando conciencia pero son esos relegados de los que nadie habla" Es cierto. Pero estamos moviéndonos y conociendo a mujeres como tú y hombres, jóvenes, con los cuales formamos empatías nada superficiales. Decir lo que se piensa de las injusticias es el primer paso...vamos a darle a la marcha!
    Un abrazo y ya te estaremos visitando por aquí o comunicándonos con correo.

    Ivonne Ramírez
    Palabras de Arena

    ResponderEliminar
  4. Hola, Ivonne:
    Vuestra contribución a nuestro blog le da una dimensión que no esperábamos.
    ¡Ánimo a esos chicos otomíes! Desde España seguiremos vuestras acciones y las difundiremos en lo posible, pues la difusión de la información ya es una manera de mover las cosas. Si se os ocurre otro modo de apoyaros, hacédnoslo saber.
    Un abrazo:
    Carmen

    ResponderEliminar