lunes, 23 de enero de 2012

WISLAWA SZYMBORSKA. Texto de la semana



La semana pasada Lupe Jover nos propuso con el acierto acostumbrado el poema Introducción a la estadística como Texto de la semana.
Aceptamos enseguida la propuesta, admirados de la lucidez que siempre encontramos en lo que vamos conociendo de la autora, Wislawa Szymborska, Premio Nobel de Literatura en 1996, por "la precisión irónica con la que ha iluminado fragmentos de la realidad humana en su contexto histórico e ideológico".
En nuestra Biblioteca, encontramos un único título suyo, Instante, de Ediciones Igitur,que había llegado a la colección de un modo curioso: preocupados por disponer de lecturas en otras lenguas, anduvimos un tiempo buscando textos bilingües, preferiblemente de poesía. Queríamos ofrecer a los alumnos recién llegados de sus países, sin rudimentos siquiera del castellano, este tipo de libros, donde podrían reencontrarse con su lengua, y empezar a leer en español comprender las palabras al contrastarlas con la versión propia, y, mediante la poesía, sentirse acogido con nosotros. Los poemas, además, tienen la ventaja de ser cortos, de una extensión idónea para el primer aprendizaje.
Nos resultó, sin embargo, muy complicado encontrar este tipo de obras, pero algunas conseguimos, sobre todo en la librería Antonio Machado y en Pasajes Internacional, especializada en lenguas extranjeras.

Así pues, el libro de Szymborska se hallaba olvidado en la sección 8, junto a los libros de "Otras lenguas", esperando a algún alumno polaco que llegara al Centro y lo leyera. Lo rescatamos ahora para la sección de Poesía, que nos parece el lugar indicado.

En el prólogo de Instante, Mercedes Monmany, presenta a Szymborska como "la gran poeta de las paradojas, de las listas de preguntas escolares, que nunca se respondieron, que nos dejaron a dos velas para el resto de la vida, esperando una respuesta."

El poema elegido nos plantea por su parte un interrogante: ¿a qué grupo de personas pertenecemos cada uno?


CONTRIBUCIÓN A LA ESTADÍSTICA

(Traducción de Gerardo Beltrán)


De cada cien personas,

las que todo lo saben mejor:
cincuenta y dos,

las inseguras de cada paso:
casi todo el resto,

las prontas a ayudar,
siempre que no dure mucho:
hasta cuarenta y nueve,

las buenas siempre,
porque no pueden de otra forma:
cuatro, o quizá cinco,

las dispuestas a admirar sin envidia:
dieciocho,

las que viven continuamente angustiadas
por algo o por alguien:
setenta y siete,

las capaces de ser felices:
como mucho, veintitantas,

las inofensivas de una en una,
pero salvajes en grupo:
más de la mitad seguro,

las crueles
cuando las circunstancias obligan:
eso mejor no saberlo
ni siquiera aproximadamente,

las sabias a posteriori:
no muchas más
que las sabias a priori,

las que de la vida no quieren nada más que cosas:
cuarenta,
aunque quisiera equivocarme,

las encorvadas, doloridas
y sin linterna en lo oscuro:
ochenta y tres,
tarde o temprano,

las dignas de compasión:
noventa y nueve,

las mortales:
cien de cien.
Cifra que por ahora no sufre ningún cambio.


- DISCURSO DE SZYMBORSKA EN LA RECEPCIÓN DEL PREMIO NOBEL

- WISLAWA SZYMBORSKA EN YOU TUBE

- EN POLACO E INGLÉS

2 comentarios:

  1. ¡Qué lúcido y hermoso poema que nos remueve las neuronas!
    No la conocía pero ya tengo un libro suyo después de haber leído este comentario.
    Gracias por compartir tantas ideas.
    Lo que tengo seguro es que somos de las personas mortales y hay que aprovechar el tiempo que pasamos aquí para que las cosas mejoren algo.
    Un abrazo y a seguir en el tajo
    Bibliolibre

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  2. ¡Qué bien, Bibliolibre! Me alegra muchísimo que hayas encontrado a Szymborska a través de ese texto. Seguro que te gustan muchos más de sus poemas. Ya nos lo dirás.
    Y sí, estoy de acuerdo: aprovechemos el tiempo para tratar de mejorar lo que podamos.
    Un abrazo también para ti.

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